She Scores for the Planet: cuando el fútbol tiene un propósito

La Fundación Paraguaya lleva a cabo con la Embajada de los Estados Unidos de América en Paraguay el programa She Scores for the Planet (Ella hace un gol por el planeta), que utiliza el fútbol como plataforma de acciones comunitarias positivas, involucrando a 180 niñas y adolescentes de escuelas públicas. Ellas participaron de competencias deportivas y trabajaron en crear un ecoemprendimiento para beneficio de sus comunidades. Este proyecto se alinea a los ejes del FEP, ya que tiene un enfoque en cambio climático e incentiva las ideas de negocio.

 

Alexandria Hall y Tori Huber, jugadoras de la selección de de volley de playa de Estados Unidos, dieron una charla motivacional especialmente dirigida a las niñas y adolescentes en el marco del #FEP2022. “Cuando hacés lo que amás depende del esfuerzo de cada uno, amar lo que uno hace y estudiar a la par es una gran satisfacción”, inició diciendo Alexandria. Apuntó que como entrenadora, busca empoderar a las chicas en un mundo en el que la mayoría en esa profesión, son hombres. Ella es la única mujer en el club en el que trabaja.

 

Para Ali, el primer paso para lograr un plan es es soñarlo, segundo es escribirlo, tercero visualizarlo y, por último, ir a la acción y lograrlo. “Cuando tenés un gran sueño no se cumple con un solo paso, sino con pequeñas metas que deberás ir logrando. La vida no se trata de hacer todo de una vez, sino que uno tiene que ir haciéndolo paso a paso. Lo mismo pasa con el deporte”, dice, y explica: “en el deporte uno se pone metas cortas: muchas veces no salen como esperamos, pero eso está bien también”.

 

Tori coincide: “Siempre que lo puedan pensar, lo pueden lograr. Primero hacete las siguientes preguntas: ¿qué te apasiona?, ¿qué querés lograr? y ¿cuáles son tus metas? Visualícense haciendo ese pase que les ayudará a hacer el gol. Y por sobre todo véanse festejando ese gol”.

 

La deportista tenía un sueño de chiquita, y ese sueño era hacer cosas como las que realiza hoy. ¿Cómo lo aborda? Con la filosofía 1% better each day (1% mejor cada día). Un ejemplo puede ser convertirse en esa persona que se levanta a la mañana temprano. “Para mí ese 1% de mejora diaria es despertarme a las 5.30 de la mañana. Digamos que durante dos semanas lo logro. Desde entonces se convierte en un hábito, y ya no es algo que hago de vez en cuando. Empiezo haciendo mi cama, tomo un café en la mañana o leo un libro con el tiempo que tengo”, ejemplifica.

 

Este es un proceso que lleva pasos, que hay que ir haciendo de a poco. Todo se vuelve más realizable si se descompone en pequeñas partes. Sin embargo, en el proceso puede pasar que te digan que no sos suficiente. “Todas escuchamos esas palabras, pero hay cosas que podemos hacer para paliar eso. Hay que ser resiliente, consistente, constante, estar comprometida. Hay gente te va a querer tirar para abajo. Pero también tenemos gente cerca que nos apoya y nos ayuda a levantarnos enseguida”, subraya.

 

“Todo empieza en uno mismo y sí se puede. Si tu mente está concentrada, podés lograr lo que te propongas”, enfatiza Tori. Lo que más les llamó la atención sobre la experiencia vivida con las chicas participantes es el hecho de combinar las culturas para compartir historias y aprender cómo podemos lograr mejores resultados juntas.